La Policía Nacional ha desarticulado en Torrejón de Ardoz un grupo criminal, que sustrajo más de 1,5 millones de euros en ropa y calzado de una conocida marca. Actuaban en la provincia de Guadalajara y del Corredor del Henares.
Los investigadores consiguieron localizar cuatro naves industriales, donde se intervinieron más de 1.000 prendas de ropa y calzado, así como multitud embalajes de paquetería sin prendas en su interior, todo ello del mismo grupo.
Los detenidos solo comercializaban las prendas a clientes habituales o mediante conocidas plataformas de compraventa entre particulares. La empresa afectada realizó compras de prueba que permitieron verificar que los artículos ofrecidos eran auténticos, nuevos y de temporada.
Sustraían los productos en el trayecto hacia las tiendas
El caso se inició tras la denuncia presentada por la representación legal de la empresa afectada, que informó de la sustracción de productos textiles entre enero de 2023 y junio de 2025, con un perjuicio económico que supera un millón y medio de euros.
Los indicios descartan que los productos hayan sido sustraídos directamente en tienda, apuntando a que su apropiación se habría producido en fases intermedias de la cadena logística, desde los almacenes de origen a su lugar a destino. La empresa afectada realizó compras de prueba que permitieron verificar que los artículos ofrecidos eran auténticos, nuevos y de temporada.
Rápida salida de los productos con descuentos del 50% en plataformas digitales
Así mismo se procedió a la inspección y registro de cuatro naves industriales utilizadas para el almacenamiento, clasificación y distribución de los productos sustraídos. Durante el registro de las cuatro naves industriales, se localizaron cerca de 1.000 prendas de vestir y calzado por valor de 100.000 euros.
Igualmente, se localizaron diez sacos llenos de embalajes logísticos vacíos, de fechas muy recientes, lo que hace suponer la rapidez con la que colocaban dichos productos en el mercado.
Los arrestados eran quien recepcionaban la mercancía y tras clasificarla, la distribuían por canales de mensajería a grupos de clientes habituales, así como la subían a plataformas digitales de compraventa entre particulares, donde contaban con gran cantidad de perfiles, poniendo una foto de la etiqueta con del precio de venta original y realizando un descuento de entorno al 50%.
Finalmente, resultaron detenidas dos personas, un hombre y una mujer, como presuntos responsables de un delito de receptación continuada, apropiación indebida, hurto y pertenencia a grupo criminal, pasando posteriormente a disposición judicial.
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