El Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz planea una profunda transformación urbanística que afectará directamente al mapa industrial de la ciudad. Así lo ha avanzado el alcalde, Alejandro Navarro Prieto, durante la presentación del estudio Estrategia por el Empleo Torrejón de Ardoz, donde ha confirmado la voluntad del Gobierno municipal de trasladar los polígonos industriales que actualmente se encuentran dentro del casco urbano hacia nuevas áreas en la periferia, más modernas, accesibles y seguras.
Reordenar la industria “que ya no tiene sentido en el centro”
El alcalde explicó que algunos polígonos nacieron en las afueras del municipio hace décadas, pero que el crecimiento urbano ha hecho que hoy queden integrados en pleno centro, lo que genera problemas de tráfico, convivencia y seguridad. “Tenemos industrias que en su día se levantaron cuando aquello eran las afueras de la ciudad, pero ahora están rodeadas de colegios y viviendas. Pasar por delante de un colegio con un camión de gran tonelaje no es bueno ni para la empresa, ni para el vecindario”, apuntó Navarro.
Entre los polígonos señalados están Las Monjas —junto a la estación y antiguamente más periférico— y la Carretera de Loeches, que actualmente está prácticamente incorporado al tejido urbano. Ambos, según el equipo de gobierno, se encuentran entre los sectores industriales que “se han quedado en el medio de la ciudad” y que deberán ser objeto de reordenación.
El objetivo, según detalló, es sacar progresivamente esa actividad industrial hacia la zona exterior del municipio, dentro de un nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que el Ayuntamiento está elaborando en coordinación con la Comunidad de Madrid, y que se adaptará a la nueva Ley del Suelo que el Ejecutivo autonómico prevé aprobar próximamente. En todo caso declaró que, aunque el objetivo es ambicioso, para llevarlo a cabo harán falta varias legislaturas.

El polígono T1, epicentro del futuro desarrollo industrial
Uno de los espacios llamados a desempeñar un papel protagonista en esta reubicación será el polígono T1, situado al este del término municipal. Navarro confirmó que este enclave acogerá nuevos desarrollos empresariales y grandes proyectos estratégicos como la futura sede unificada de Indra, un complejo que reunirá distintas divisiones tecnológicas y de defensa de la compañía.
“Parece que el T1 será el lugar donde Indra se va a instalar, y también donde irá el desarrollo futuro de los nuevos polígonos de Torrejón”, señaló el alcalde. “Queremos que la ciudad siga teniendo industria, porque Torrejón históricamente ha sido un municipio industrial, pero adaptado al siglo XXI, con polígonos modernos, más accesibles y eficientes”, añadió.
Permutas, compensaciones y planificación a medio plazo
El proceso, que aún se encuentra en fase de planificación, no supondrá la pérdida de tejido empresarial, según insistió el regidor. “No podemos perder las empresas que tenemos, pero debemos facilitarles un espacio más adecuado”, explicó. Para ello, el Ayuntamiento contempla distintas fórmulas urbanísticas, como permutas de terrenos o reparcelaciones, que permitan a las compañías trasladarse sin perjuicio económico ni operativo.
La intención es reconvertir los espacios industriales obsoletos del centro en nuevos ámbitos urbanos, posiblemente destinados a usos residenciales, dotacionales o de servicios. “La ciudad está prácticamente colmatada, salvo la zona del T1 y parte del sur, que empieza ya a desarrollarse. Tenemos que generar nuevos espacios para las empresas, pero también para seguir creciendo como ciudad”, destacó Navarro.
Una ciudad con alta actividad económica
El estudio Estrategia por el Empleo Torrejón de Ardoz presentado hoy revela que el municipio mantiene un tejido empresarial robusto, con más de 8.000 empresas registradas. Según las estimaciones del Ayuntamiento, la población activa supera el 65%, una cifra similar a la de otros grandes municipios del Corredor del Henares como Alcalá de Henares, San Fernando o Coslada.
Este contexto de dinamismo económico refuerza la necesidad de planificar el crecimiento industrial y urbano con equilibrio. “Queremos seguir atrayendo grandes empresas, pero con una planificación ordenada, que garantice calidad de vida a los vecinos y seguridad a las empresas”, afirmó el alcalde.
Una ciudad moderna, segura y sostenible
El traslado de las zonas industriales se enmarca en un proyecto de ciudad más amplio, con el que el equipo de gobierno pretende actualizar un Plan General que data de hace décadas y que, según Navarro, “ya no se corresponde con la realidad de la ciudad actual”.
El nuevo modelo urbano busca un equilibrio entre actividad económica, movilidad sostenible y calidad de vida, alineado con las estrategias de modernización del Corredor del Henares.
“El reto es mantener nuestra esencia industrial, pero adaptándonos a una ciudad moderna, segura y sostenible”, concluyó el alcalde, anticipando que el proyecto se desarrollará en los próximos años de forma progresiva y consensuada con las empresas afectadas.