El anuncio de la llegada de la Universidad Católica de Murcia (UCAM) a Torrejón de Ardoz ha creado polémica en los grupos de oposición. En el último pleno ordinario municipal, el grupo municipal socialista llevaba una moción para que se rechazase la llegada de la UCAM que tiene previsto abrir su campus en el antiguo edificio del Colegio Camino Real, situado en el número 190 de la Avenida de la Constitución.
Diario de Torrejón ha hablado con el alcalde de la ciudad, Alejandro Navarro, y con el concejal de Obras, Limpieza Urbana, Administración y Contratación, Valeriano Díaz, sobre este nuevo proyecto educativo.
Preguntado por las críticas del PSOE, Alejandro Navarro, respondió que «la oposición trata de hacer su papel, que es erróneo y que no va en pro de los intereses de la ciudad y de sus ciudadanos».
Sin embargo, aseguran estar muy contentos de la llegada de la UCAM. «Es algo que parecía impensable tiempo atrás (que Torrejón de Ardoz tuviera universidad)». Y añadió: «Trataremos de ofrecer a todos los alumnos todas las posibilidades que tengamos».
Además, el alcalde defendió que la UCAM es «la Universidad del deporte» y su llegada a la ciudad puede fomentar el impulso de deportistas locales.
Preguntado por la compatibilidad de proyectos con el que tienen entre manos con la Universidad de Alcalá de Henares, aseguró que sí. Y, de hecho, afirma que la idea es «hacer de Torrejón de Ardoz una ciudad universitaria».
Por su parte, Valeriano Díaz, admitió haberse sentido directamente aludido cuando la oposición del PSOE relacionó la universidad católica con la homofobia. «Me sentí un poco dolido porque creo que generalizar y decir que los católicos somos homófobos y todas esas cosas que ponen con el apellido católico no es justo», denunció.
«A los de Torrejón no nos gusta que nos impongan modelos de vida ni de sociedad. Somos gente muy libre que sabemos elegir en cada momento», defendió.
Y añadió: «Somos capaces de que venga la Pública que es nuestra apuesta y que a la vez lleguen instituciones privadas como pasó con Quirón, que es absolutamente compatible con el hospital».
Alejandro Navarro concluyó que la UCAM ha comprado suelo privado y que el ayuntamiento no puede ponerle «veto, sino facilidades para que lleguen a nuestra ciudad y se implante lo antes posible».
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